25.2.23

Regreso a casa

Regresar a casa es mi verdadero trabajo. Desaprender para no quedarme pegada en cosas que no quiero. 

Cambiar la historia que ha sido dar unos pasos y pegajosearme en las cosas, dar otro y atascarme en el lodo. Despegajosearme, desatascarme; y no solo por una vez sino llevar mi ser al camino opuesto. ¿Hacia dónde?

Encontrar el lugar, la coordenada donde soy y no salirme de ahí, porque ahí es donde me voy a encontrar lo que es. Sea lo que sea que me encuentre, ahí es donde quiero y necesito y disfruto y merezco estar. Solo ahí es donde soy, ¿qué más grande motivo para seguir el camino?

Las cosas que tú buscas te buscan, sí. Te buscan en tu domicilio, no fuera de casa. 

Eso me digo. Eso es. Ser en mí. A favor y a pesar de todo.

Esta noche de lluvia me refresca la voluntad. 

*

La vida me quitó por unos días la movilidad geográfica. Un cristalazo en el carro y lluvia es una combinación curiosa que acepto al saberme no dueña del mapa completo por ahora. La vida me guía: yo me dejo llevar. Ok, sin carro este fin de semana. Gracias por todo. Supongo que esto también forma parte del gran rompecabezas de esa figura que todavía no logro reconocer. Frente a mi mesa de piezas hay un azul, hay un verde y también el rojo está presente. Bienvenido mi cuerpo seas a esta historia. Ya estabas en ella, pero ahora eres el elemento de honor.








No hay comentarios.: