12.3.13

toro ciego en cámara lenta

creo que ya he tenido en la vida mi dosis suficiente de recepción de mentiras y verdades a medias.
lo he tenido de formas concentradas, espesas. sé el profundo daño que pueden hacer.
conozco muy bien al toro ciego que torpemente va destruyendo todo a su paso en cámara lenta. conozco esos ojos de la mentira con mayúsculas. esos ojos que miran fijo y constante. que desvían la mirada así de formas tan imperceptibles que hasta parecen guiños. conozco ese olor que se va deslavando. esa esencia casi auténtica que insiste, que hipnotiza, que encanta como música a la serpiente en medio de la fiesta. los colores. la marea tentadora de las palabras.
también conozco el día siguiente y su peso. la loza sucia apilada en el lavaplatos. la cuenta en la mesa con sus números y sus muertos.

sé que es sólo una señal para ver hacia mi propia casa de espejos, como lo es todo.
sin embargo, hoy tengo mis ojos más abiertos y eso no podría ignorarlo. tratar de hacerlo, sería mentirme. afortunadamente hoy tengo mis ojos más abiertos. herencia de mis propias cuentas. regalo afortunado de mis propias cuentas.
por eso me niego a participar. me niego a usar mi presente en eso.
he trabajado mucho, y lo seguiré haciendo, por que sea lo que es. claridad, luz, respiración profunda, verdad con todas sus letras y sonidos. por eso he dado todo y lo seguiré dando, porque sé que no hay otro lugar desde el cual poder construir.
por eso: adelante, pásele, lo que busca no está aquí.
cada quien a lo suyo. lo mío está en otra parte. sigo mi camino.